Jordi Blàzquez

Jordi Blàzquez es piloto de helicópteros

"Lo que más destacaría de esta profesión es la sensación de tienes al volar."

Jordi Blàzquez Martínez, barcelonés de 43 años, lleva 9 años como piloto de helicópteros y 3 años como operador de grúa. Actualmente trabaja de piloto de helicópteros para el Servei Català de Trànsit y también para los Bomberos de la Generalitat de Catalunya.

¿Qué tareas desarrollas como piloto de helicópteros?
Para Trànsit hago vuelos de gestión, información y vigilancia del tráfico, y para los Bomberos, hago de piloto contraincendios.

¿Qué pasos has seguido para estar donde ahora estás?
Empecé a sacarme el título de piloto privado cuando tenía 26 años y lo compaginaba con el trabajo que tenía antes. Al acabar, continué estudiando para sacarme el título de piloto comercial (es el título con el que puedes trabajar). Dejé el trabajo para dedicarme a estudiar y a volar, tardé 2 años a sacarme la licencia y trabajaba como operador de vuelos en los veranos. Como operador de vuelos hice 6 campañas de verano y entonces entré en los Bomberos como operador de grúa y también me salían las primeras faenas como piloto (fotografía aérea). Cuando tuve unas 500 horas de vuelo me contrató una empresa de helicópteros y comencé a volar para ellos. Al cabo de 4 años, entré como piloto para el Servei Català de Trànsit y en los veranos hago la campaña contraincendios.

"Creo que es el esfuerzo lo que te ayuda a llegar a tener una estabilidad laboral."

¿Cómo es tu día a día?
Normalmente me toca trabajar unos días al mes, hago guardia en la base por si sale un vuelo. Algún día también puede ser que tenga vuelos programados.

¿Qué destacarías de tu profesión?
La sensación que tienes al volar.

Alguien a quien admiras en el ámbito de tu profesión.
Los pilotos de rescates y los de carga aérea.

Una película que volverías a ver.
Head, de Bob Rafelson.

Un libro de cabecera para tu profesión.
Manual Básico del Helicóptero.

Un consejo a un joven que sueña con ser piloto.
Que haga un bautizo de vuelo y, si le gusta y se lo puede permitir económicamente, que lo pruebe, eso sí, con mucha paciencia y tranquilidad. No se debe tener prisa para volar.

¿Cambiarías algo de tu trayectoria tanto académica como profesional?
Empecé cuando tenía 26 años y teniendo en cuenta que se tarda unos 10 años en encontrar la estabilidad, si pudiera volver atrás habría comenzado con 18 años.