Trabajar en verano

Trabaja en verano

Trabajar en verano
Si el curso te ha ido bien, el verano es un buen momento para ponerte a trabajar, ya que las clases se han acabado, tienes tiempo libre y, es una buena oportunidad para coger experiencia profesional.
Dedicar el año a estudiar y centrarte en aprender y destinar las vacaciones a trabajar es una opción cada vez mejor acogida por los jóvenes. En verano se amplían las ofertas de empleo por la gran afluencia de turismo que visita nuestro país o porque es tiempo de vacaciones y mientras tú quieres trabajar otros prefieren tomarse un descanso. Antes de ponerte a buscar, es necesario que te hagas una serie de preguntas para que después te sea más fácil decidirte por una oferta u otra.
 
¿Por qué quieres trabajar?

Puede ser que necesites trabajar porque estás sin un euro en el bolsillo y, claro, necesitas dinero para las vacaciones, los caprichillos o para costearte los estudios del año siguiente… Aunque también puede que tu objetivo sea adquirir experiencia a través de unas prácticas laborales relacionadas con lo que estás estudiando o estudiarás.


¿Dónde quieres trabajar?

Trabajar durante los meses estivales no significa, obligatoriamente, tener que quedarte en casa, ya que puedes buscar trabajo en alguna otra localidad de tu misma provincia o de otra comunidad autónoma, o bien ir al extranjero. Aunque, a lo mejor, no quieres alejarte de tu familia ni de tus amigos y prefieres quedarte en tu municipio o alrededores.

El tipo de trabajos que puedes realizar también es muy variado, puede que esté relacionado con tus estudios o no, lo importante es que con este trabajo adquirirás una serie de competencias profesionales muy importantes para tu futura profesión.



¿Qué horario puedes hacer?

Jornada partida: haces las 8 horas diarias, pero no de forma seguida, sino que se te deja tiempo para comer y puede ser que, también, para descansar.

Jornada intensiva: trabajas todas las horas seguidas.

Media jornada: trabajas 4 horas diarias.

Trabajar por horas: haces unas horas al día o la semana, cosa que te permite combinar el trabajo con otras actividades u ocupaciones.